18/1/10

pantallicas con dedicos

Ahora mismo tengo encima de la mesa tres dispositivos de comunicación/herramientas de trabajo diferentes, pero muy parecidos.

Estoy escribiendo éstas líneas con un ordenador portátil de los de toda la vida, un Dell Vostro 1320 con un superprocesador Intel Core 2 Duo P8700 con VT, 4 gigas de RAM, una nVidia 9200 y un disco duro de 320 gb. Mi primera herramienta de trabajo, con arranque dual Windows 7 / Debian 5.0.

A la derecha tengo un ultraportátil, o netbook Acer Aspire One, con un procesador Atom mucho menos potente, 1 GB de RAM y una unidad de almacenamiento de estado sólido.

Y a la izquierda tengo mi Blackberry Storm de empresa, que es un Smartphone, un teléfono con una enorme pantalla táctil y conexión de datos 3G, como el de la imagen que acompaña a éste post.

Cualquiera de los tres aparatos son complejas máquinas que hace veinte años podrían haber sido producto de la imaginación de un escritor de ciencia ficción y que, sin embargo, hoy en día son electrodomésticos de lo más común. Y la frontera entre la ciencia ficción y los chismes de uso cotidiano cada vez es más delgada.

Hoy por hoy es difícil que los ordenadores portátiles -laptops- sean sustituidos de golpe y plumazo por otro tipo de dispositivos, pero estamos siendo testigos de la llegada de otra clase de aparatos que sustituyen ciertas funciones primarias de éstos y que aumentan la comodidad de uso. El 2009 fue el año de los netbooks, ordenadores portátiles de baja potencia pero con un peso y autonomía muy mejorados con respecto a éstos, que permiten hacer tareas como navegar, chatear, ver vídeos o escribir textos sin depender de un armatoste de 3 kilos que se queda sin batería a la hora de uso. Parece que podrían haberse vendido todavía más, pero no ha sido así, más que nada porque su escasa potencia y porque su reducido tamaño implican un teclado incómodo y una pantalla de baja resolución; aunque parte de la culpa de su declive puede haber sido la entrada en escena de un tipo de dispositivo más adecuado para la tarea exclusiva de la lectura de textos -los eBooks- y otro más cómodo para el uso instantáneo, sacar del bolsillo y usar -los smartphones-.

La convergencia entre unos dispositivos y otros -portátiles, netbooks, ebooks y smartphones- nos lleva a la nueva generación de ordenadores portátiles, compactos, siempre encendidos, táctiles y con conexión permanente, que incluyen una no demasiado novedosa característica que puede ser aprovechada por los Sistemas Operativos que ya se están desarrollando para los teléfonos móviles: las pantallas táctiles.
Quizás en la unión de los sistemas operativos como Android o iPhone OS con las nuevas tablet-pcs, como la rumoreada tablet de Apple esté el secreto para conseguir que todos llevemos encima algún día un ordenador integrado en nuestra vida cotidiana y que aúne las funciones de un PC, un teléfono móvil, un reproductor multimedia y un lector de libros.

No hace falta decir que me encantaría tener un dispositivo del tamaño de una cuartilla A5 (sobre 210 x 146 mm), con pantalla multitáctil y teclado desplegable (como el de la Tablet de Dell), una buena resolución (1280x800 es suficiente, no voy a usar un dispositivo portátil para ver películas en Full HD), GPS y brújula, conexión 3G/HSDPA, Bluetooth y WiFi a/b/g/n, unidad de estado sólido (no hace falta demasiada capacidad si podemos evaporar los archivos a la nube) para que sustituya a mi portátil, a un eBook y a mi teléfono si le sincronizo un "pinganillo" bluetooth. Sobre todo si incluye un sistema operativo que lo haga usable. Pero quizás el último escollo que queda por salvar es que esos nuevos tablet-pcs se conviertan en algo realmente llevable, que no sea un incordio echárselo al bolsillo. Y ahí es cuando cobra importancia el desarrollo de nuevas pantallas más resistentes, con menos consumo eléctrico y flexibles, como la del Skiff Reader, que permitan enrollar el PC para llevarlo consigo, o que se adapte bien al bolsillo -en sentido literal-. Y ya quedará menos para vivir en el futuro. Lo siguiente será hacer que la batería le dure toda la vida.

1 estúpidos comentarios:

Anónimo dijo...

Vamos que estas al dia en "tecnologia" , yo cada vez le estoy pillando mas tirria y solo me atrae pegarle patas y destruir equipos electronicos, si fuese rico de cojones me compraria todo lo mas puntero en tecnologia que saliese cada dia na mas pa darme el gustazo de romperlo.